Algunos ejemplos » Ética del profeta»
Muhammad el Profeta, hombre de religión y de gobierno:-
¿Cuántas personas grandiosas y líderes trataron de construir glorias y de establecer un mensaje humano? Pero nadie, a lo largo de la historia pudo crear un delicado y bien pensado sistema aplicando las necesidades tanto del cuerpo como del alma.
Pero el Profeta Muhammad (la paz sea con él) llegó con algo nuevo a todo el mundo, mezclando con una gran armonía lo espiritual y lo material, nunca encontrado antes. Así construyó un gobierno incapaz de sobrevivir sin religión.
El Profeta curó las heridas del alma causadas por la vida material, y llenó la brecha materialista de las necesidades por estar lejos de las necesidades del alma.
Así fue, de hecho, un verdadero maestro espiritual, un político honesto y un juez justo, que unificó a las tribus salvajes con los pueblos civilizados, y unificó a todas esas personas en una nación que construyó gloria y puso a la vida bajo la creencia de Al-lah Todopoderoso, “No existe otro dios más que Al-lah, y Muhammad es el Mensajero de Al-lah”.
Muhammad el Profeta, el hombre de la elegancia y belleza:-
Si usted pregunta acerca de las cosas que al Profeta (la paz sea con él) le gustaban más, obtendrá tres respuestas, comenzando por el perfume. A él le gustaba mucho el olor agradable de los perfumes, y nunca olía mal. Además, el Profeta era muy elegante; el más elegante entre su gente, brillando en sus ropas como la luna en el cielo.
Y lo mejor es que la apariencia del Profeta era elegante en una sociedad alejada de la limpieza y de la sofisticación. Él era como una hermosa flor en el desierto árido, y como el cálido fuego en el desierto helado, y como la primavera en una tierra sin vida.
La sonrisa era el lema del Profeta:-
Qué importante es en el mundo en que vivimos, lleno de crisis sociales y de enfermedades psicológicas, mantener una sonrisa en nuestros rostros, como la que el Profeta (la paz sea con él) le pidió a sus seguidores a mantener todo el tiempo.
El Profeta (la paz sea con él) liberó a sus seguidores de todas las enfermedades del corazón, de las crisis psicológicas y de las presiones de la vida que demuelen la vida humana, para alcanzar la felicidad y la paz interior. Entonces, hizo de la sonrisa su eslogan en el sufrimiento y en la felicidad, y nunca se le vio sino sonriendo. Su sonrisa curaba la tristeza de todas las personas alrededor de él, y sanaba los dolores de sus compañeros.
Abdullah bin Al Harith informó: “Nunca vi a un hombre sonriendo más que el Profeta (la paz sea con él).”
Pero nunca fue más allá de los límites; no exageró en la forma de sonreír o de reír, sino que solía sonreír de forma respetuosa y cortés.
Abdullah biin Al Harith dijo: “La manera del Profeta de reír, era sólo a través de su sonrisa.” Narrado por Al Tirmidhi. Esto significa que solía reír sin reír a carcajadas, y lleno de respeto.
Muhammad el Profeta, el hombre de tolerancia y noble perdón:-
Quien estudie la historia de los grandes hombres y líderes, durante una victoria después de una batalla perdida, encontrará un rasgo común entre todos ellos, excepto entre los profetas, que es la venganza.
Muhammad el Mensajero (la paz sea con él) ha dado un magnífico ejemplo de nobleza en la victoria. A pesar de haber sido exiliado de La Meca, de haber sido confiscados sus bienes, y de haber sido gravemente herido por su pueblo al principio de su profecía, al entrar a La Meca con abrumadora victoria, su gran personalidad y generosidad no dio lugar a la venganza. Él perdonó a todos quienes lo habían oprimido, en el momento que fue capaz de vengarse de ellos. Les dijo: “Ustedes pueden irse, ustedes son libres.”
De tal manera, el Islam enseña estas características de Muhammad y de sus compañeros, tales modales libres de egoísmo.
El Sagrado Corán dice: “Utiliza el perdón, ordena lo que está bien, y aléjate de los tontos (es decir, no los castigues).”
Muhammad el Profeta, el hombre simple:
A Muhammad le gustaba que las cosas fueran fáciles para la gente, y no le gustaba hacer las cosas difíciles o duras para ellos.
Les dijo a sus seguidores: “Traigan buenas nuevas, no dejen que la gente se aleje, hagan las cosas fáciles, y no hagan las cosas difíciles para la gente.”
También dijo: “He sido enviado para simplificar y no para hacer las cosas más difíciles.”
Muhammad el Profeta, anima a los nobles y refinados deportes:-
Muhammad el Profeta (la paz sea con él) alentó a sus compañeros a practicar deportes refinados, los cuales se basan en el fortalecimiento del cuerpo y la recreación del espíritu, y brindan beneficios a la sociedad sin derrochar dinero, y sin corromper las costumbres.
Él mismo practicó algunos deportes, como correr, lucha libre y equitación. Pero el requisito del deporte en la constitución del Profeta Muhammad son las maneras nobles y refinadas, y el que tengan metas sublimes.
El fuente :www.rasoulallah.net