¿POR QUÉ NOS CREÓ DIOS?

INTRODUCCIÓN
EL PROPÓSITO DE LA CREACIÓN ES UN TEMA QUE HA DEJADO ASOMBRADO a cada ser humano alguna vez en su vida. Todos alguna vez nos hemos tenido que enfrentar a la pregunta «¿Por qué existo?», «¿Cuál es mi propósito en ésta vida?».
La variedad y complejidad de los sistemas intrincados que constituyen la infraestructura tanto del ser humano como el mundo en el que existen indica que debe existir un Ser Supremo quién los creó. Un diseño por ende tiene un diseñador. Cuando las personas dejan sus rastros sobre las arenas de la playa, inmediatamente llegamos a la conclusión que un ser humano caminó antes de nosotros (recuerden a Robinson Crusoe). Pero nadie imaginaría que las marcas de las huellas de los pies las dejaron las olas del mar, excepto que se tratase de un absoluto imbécil. Y que también fueron dejadas sin propósito alguno. Puesto que una acción con un propósito o fin es el resultado natural de la inteligencia humana, los hombres concluyen que el Ser Supremo Inteligente quien los creó los hizo con algún propósito específico. Por lo tanto, los seres humanos necesitan saber el propósito de su existencia para que así tenga sentido ésta vida y hacer lo que es el fin benéfico para ellos.
A través del tiempo, sin embargo, ha habido una minoría de personas que han negado la existencia de Dios. La materia, en su opinión, es superflua y la humanidad es producto del azar por combinaciones accidentales de sus elementos. En consecuencia, para ellos, la pregunta «¿Por qué Dios creó al hombre?» no tuvo ni tendrá respuesta para ellos. De acuerdo a ellos, simplemente no hay motivo para vivir. Pero, la vasta mayoría de la humanidad a través del tiempo ha creído y continúa creyendo en la existencia de un Ser Supremo que creó este mundo con algún fin. Para ellos, fue y seguirá siendo importante conocer acerca del Creador y el propósito por el cual El creó a los seres humanos.
LA RESPUESTA
Para resolver la cuestión «¿Por qué Dios creó al hombre?» en primera instancia debe determinarse desde cualquier ángulo que la pregunta haya sido realizada. Desde el punto de vista de Dios sería «¿Qué motivó a Dios a crear seres humanos?», mientras que desde el enfoque humano sería «¿Con qué propósito Dios creó a los humanos?», Ambos puntos de vista representan aspectos de la intrigante cuestión «¿Por qué existo?» En las siguientes páginas, los dos aspectos del tema a tratar serán explorados en base a una imágen esclarecida por la revelación divina. Esto no es un tópico especulativo, porque la mera conjetura posiblemente no pueda producir la verdad absoluta en éste asunto. ¿Cómo pueden los seres humanos intelectualmente deducir la realidad de su existencia cuando ellos difícilmente pueden entender la manera en que sus cerebros o su esencia superior, la mente, funciona? En consecuencia, los cuantiosos filósofos que han especulado sobre la cuestión por eras han dado múltiples respuestas, las cuales se basan en suposiciones que no pueden ser probadas. Preguntas de dicha índole inclusive han llevado a muchos filósofos a proclamar que en la realidad nosotros no existimos y que éste mundo es imaginario. Por ejemplo, el filósofo griego Platón (428-348 A. C.) argumentó que cada día el mundo de las cosas mutables, que el hombre llega a conocer por medio de sus sentidos, no es la realidad primaria, sino que es un mundo de sombras, de apariencias1 . Muchos otros, como fue el antes mencionado, proclamaron y continúan proclamando que no hay propósito alguno; que la existencia humana es meramente producto de la casualidad. Puede que no haya propósito cuando la vida evolucionó de materia inanimada para luego convertirse en materia viva por obra de la casualidad. La humanidad asumió que tiene «primos», los chimpancés y primates en general, los cuales no se molestan en hacer preguntas acerca de su existencia en la tierra, entonces, ¿Por qué el ser humano se molesta en hacerlas?
Aunque mucha gente pone en duda el ‘por qué fuimos creados’ después de breves reflexiones, es extremadamente importante para los seres humanos conocer la respuesta. Sin conocimiento de la respuesta correcta, los seres humanos no son distintos de los animales que les rodean. La necesidad y el deseo de comer, beber y procrear de las bestias se convierte así en el propósito de la existencia humana en conclusión, y los esfuerzos humanos son entonces enfocados a este nivel tan limitado. Cuando la satisfacción material se desarrolla como el objetivo principal de nuestras vidas, la existencia humana es degradada aún más que el del animal más vil. Los seres humanos en consecuencia harán mal uso de su inteligencia – regalo de Dios – cuando estos escasean en conocimiento del propósito de su existencia. La mentalidad humana degradada utiliza sus habilidades para crear y disfrutar de las drogas, las armas, la fornicación, la pornografía, la homosexualidad, la enfermedad, el sortilegio, el suicidio, etc., sin conocimiento del propósito por el cual hemos venido, nosotros, la humanidad entera. Perdemos el significado de la vida y en consecuencia es basura. Y la recompensa de una vida eterna de felicidad en el más allá está completamente echada, destruida. Por lo tanto, es de suma importancia que los seres humanos contesten correctamente la pregunta «¿Por qué estamos aquí?»
Muchas personas a menudo se dirigen a otra persona como ellas para las respuestas, sin embargo, el único lugar que aclara y responde con precisión a estas preguntas se puede encontrar en los libros de revelación divina. Fue necesario que Dios revelase el propósito de la vida al hombre por medio de sus profetas, porque los seres humanos son incapaces de llegar a la respuesta por sí mismos. Todos los profetas de Dios enseñaron a sus seguidores las respuestas a la pregunta «¿Por qué Dios creó al hombre?»
LAS ESCRITURAS JUDEO CRISTIANAS
Una revisión a la Biblia deja perdido al sincero buscador de la verdad. El viejo Testamento parece más bien encaminado a las leyes y a la historia de la antigua humanidad y el pueblo judío que a responder la cuestión vital concerniente a la creación del hombre2 . En Génesis, Dios crea al mundo y a Adán y Eva en seis días y ‘descansa’ de su obra en el séptimo día3 . Adán y Eva desobedecen a Dios y son castigados; y su hijo Caín mata a su otro hijo, Abel, y el primero va a habitar en la tierra de Nod. Y dios, ¡se ‘lamentó’ de haber hecho al hombre! ¿Por qué las respuestas no están claras y en términos innegables? ¿Por qué hay tanto de ese lenguaje simbólico, dejando al lector adivinar sus significados? Por ejemplo, en Génesis 6:64 se establece que, «Cuando los hombres empezaron a multiplicarse sobre la faz de la tierra, e hijas nacieron de ellos, los hijos de Dios vieron que las hijas de los hombres eran bellas; y ellos tomaron por esposas a las que ellas escogían.» ¿Quienes son estos «hijos de Dios»? Cada secta judía, y muchas otras sectas cristianas igualmente creen, que todo tiene su propia explicación. ¿Cuál es la interpretación correcta? Es más, ¡¿Cuál posee la verdad absoluta?! La verdad es que el propósito de la creación del hombre fue enseñada por los profetas de la antigüedad. Sin embargo, algunos de sus seguidores -coludidos con los demonios – posteriormente cambiaron las escrituras. Las respuestas se volvieron ambiguas y oscuras y mucha de la revelación fue oculta en un lenguaje simbólico, esotérico. Cuando Dios envió a Jesús al pueblo judío, él volcó las mesas de aquellos mercaderes que alzaron negocios dentro del templo5 y predicó contra la interpretación ritualista de la Ley practicada por los rabinos judíos. El reafirmó la ley de Moisés y la revivió. El enseñó el propósito de la vida a sus discípulos y demostró como llevarlo a cabo hasta que permaneció en los últimos momentos sobre ésta tierra. Sin embargo, después de partir del mundo, su mensaje también fue distorsionado por algunos que proclamaron ser su seguidores. La verdad pura tal cual la trajo se volvió trágicamente nublada, al igual que los mensaje de los profetas anteriores a él. El simbolismo entró en la doctrina, especialmente a través de las «revelaciones» de Juan; y el Evangelio que se reveló a Jesús se perdió para siempre. Cuatro otros evangelios, composición y autoría humana, fueron elegidos a concurso por Athanasius, Obispo del siglo cuarto6 , que reemplazaron el Evangelio perdido de Jesucristo. Y los 23 libros escritos por Pablo y otros incluidos en el Nuevo Testamento excedieron en número aún a las cuatro versiones del evangelio7 . Como resultado, los lectores del Nuevo Testamento no pueden encontrar respuesta precisa a la pregunta «¿Por qué Dios creó al hombre?»8 Y uno se ve obligado a seguir ciegamente los dogmas controvertidos de cualquier secta que surge, ya sea para adoptarla o pertenecer a ella. Los evangelios son interpretados de acuerdo a cada una de las creencias de la secta correspondiente y el buscador de la verdad nuevamente está en duda, ¿Cuál de ellas es la correcta? LA ENCARNACIÓN DE DIOS
Tal vez el único concepto en el cual la mayoría de las sectas cristianas están definitivamente de acuerdo con respecto al propósito de la creación de la humanidad por Dios es que El se volvió hombre para así después morir a manos de los hombres y purificarlos de sus pecados, herencia de Adán a su descendencia. De acuerdo a ellos, el pecado se había vuelto tan grande que ningún acto humano de expiación o arrepentimiento podría borrarlo. Pero Dios es tan bueno y puro que ningún hombre pecaminoso podría estar en su presencia. Consecuentemente, solamente el sacrificio de Dios proveniente de Sí Mismo podría salvar a la humanidad del pecado.
La creencia en éste mito de corte humano se volvió la única fuente de salvación de acuerdo a la Iglesia. En consecuencia, el propósito cristiano de creación se volvió auténtico reconocimiento del ‘sacrificio divino’ y la aceptación de que Jesucristo es el Señor Dios. Esto puede deducirse en las siguientes palabras atribuidas a Jesús en el Evangelio de Juan,»Para Dios tan amado y el mundo que El dio a su único hijo, quienquiera que crea en él no perecerá sino tendrá vida eterna.»9 Empero, si éste es el propósito de la creación y el prerequisito para la vida eterna, ¿Por qué no fue enseñado por todos los profetas? ¿Por qué Dios no se volvió hombre en los tiempos de Adán y su progenie de modo tal que la humanidad entera tuviese una oportunidad igual para llevar a cabo el propósito de su existencia y obtener la vida eterna ó acaso tuvo para los tiempos anteriores a Jesús otro propósito diferente de existencia? Toda la gente hasta ahora, a quien Dios condenó jamás escuchar el mensaje de Jesús o tan siquiera haber oído su nombre, ¿No tienen entonces la oportunidad de llevar a cabo el propósito de la creación que se supone deben lograr? Tal propósito, obviamente es muy limitado para ajustarse a las necesidades humanas.
TODO ES DIOS
Las escrituras hindúes enseñan que hay muchos dioses, encarnaciones de dioses, personalidades de Dios y que todo es Dios. A pesar de la creencia de que la esencia de uno (atman), y de todos los seres vivos es Dios (Brahman), es un sistema de castas opresor evolucionado en el cual los Brahmans, la casta sacerdotal, posee supremacía espiritual por nacimiento. Ellos son los maestros de los Vedas10 y representan el ideal de la pureza ritual y el prestigio social. Por el otro lado, la casta de los Sudras está excluida del status religioso y su único deber en la vida es «servir humildemente»11 a las otras tres castas y las miles de subcastas fabricadas.
De acuerdo a los filósofos monistas hindúes, el propósito de la humanidad es la realización de su divinidad -seguir un camino (marga) a la emancipación (moksha) de la rueda de la reencarnación – y la reabsorción del alma humana (atman) dentro de la realidad última, Brahman. Para aquellos que siguen la senda bhakti,12 el propósito es amar a Dios porque Dios creó a la humanidad para «disfrutar una relación – como un padre disfruta la compañía de sus hijos-.» (Srimad Bhagwatam).Para el hindú ordinario, el objetivo principal de la vida mundana descansa en la conformidad de los deberes rituales y sociales; a las normas tradicionales de conducta para la casta a la cual se pertenece (la senda del karma)13 .Aunque mucha de la religión de textos védicos que giran en torno a rituales de sacrificio del fuego, han sido eclipsados por las prácticas y doctrinas hindúes de diferentes textos, aunque la autoridad absoluta y santidad de los Veda sigue siendo el dogma central que virtualmente están arraigados en las tradiciones y sectas hindúes. El Veda está compuesto de cuatro colecciones, la más antigua de las cuales es el Rig Veda («Sabiduría de los versos»). En estos textos, Dios es descrito en el más confuso de los términos. La religión reflejada en el Rigveda es un politeísmo enfocado principalmente a deidades pasivas, asociadas con el cielo y la atmósfera, de las cuales la más importante era Indra (dios de los cielos y la lluvia); Baruna (guardián del orden cósmico); Agni (el fuego del sacrificio); y Surya (el sol). En textos védicos posteriores, el interés en los antiguos dioses del Rig Veda declinaron y el politeísmo comienza a ser reemplazado por un panteísmo de sacrificio hacia Prajapati («Amo de las criaturas»), quien es el Todo. En los Upanishads (enseñanzas secretas relacionadas a las ecuaciones cósmicas), Prajapati emerge con el concepto de Brahman, la realidad suprema y substancia del universo, reemplazando cualquier personificación específica, transformando así la mitología en filosofía abstracta14 . Si los contenidos de éstas escrituras fuesen para todos los seres humanos y ser escogidas como guianza alguna, uno tendría que concluir que Dios se esconde tanto de Sí Mismo como al propósito de la creación humana.
Dios no es el autor de la confusión, y El no desea dificultad para el hombre. En consecuencia, cuando El reveló Su mensaje final a la humanidad mil cuatrocientos años atrás, El aseguró que fuera perfectamente preservado para todas las generaciones de humanos en el porvenir. En ese mensaje final, el Corán, Dios reveló su propósito de crear a la humanidad y, a través de su último profeta; El esclareció todos los detalles que el hombre pudiese comprender. Esta sobre la base de ésta revelación y las explicaciones proféticas de que las respuestas precisas a la pregunta «¿Por qué Dios creó al hombre?» serán analizadas en los capítulos siguientes.
¿POR QUE DIOS  NOS CREÒ?
DESDE EL PUNTO DE VISTA DE  DIOS, queda una pregunta fundamental más que necesita ser hecha, «¿Por qué Dios creó?» Esta pregunta debería cuestionarse porque la humanidad no es de hecho la más grande de las creaciones. Dios dice en el capítulo Ghaafir de la revelación final:
«En verdad, la creación de los cielos y la tierra es más grande que la creación de la humanidad, pero mucha de la humanidad no se da cuenta de ello.»
Corán 40:57
La composición de los seres humanos está bastante lejos de ser compleja como es la composición del universo en el cual existen. Sin embargo, muy poca gente reflexiona sobre ésta realidad. Por la aparente supremacía de los seres humanos sobre otras criaturas de la tierra y sus viajes al espacio como el continuo avance de la tecnología y el conocimiento, la humanidad se vuelve más arrogante al pasar el tiempo. Es importante notar que la mayoría de los descubrimientos asombrosos de la humanidad no involucran al ser humano sino a lo que le rodea. Así, los esfuerzos humanos tienden a enfocarse en el mundo material más bien que en el ser humano. En la aleya anterior, Dios vuelve a los seres humanos al estado actual de cosas en éste mundo. La humanidad es meramente una pequeña parte del acto milagroso divino de la creación. Así, para entender por qué Dios creó a la humanidad, uno mismo primero necesita contestarse la cuestión aún más fundamental de por qué Dios creó.
EL CREADOR
La creación es fundamentalmente la consecuencia del atributo divino de ser del Creador. Un creador que no crea es una contradicción en el término. Esto no significa que Dios necesite de su creación, porque Dios es libre de toda necesidad. Es la creación quien le necesita. Pero, la grandeza de un escritor (por ejemplo) se vuelve aparente en sus escritos; la perfección del atributo creativo divino es manifiesto en la creación. La creación en el sentido estricto de la palabra pertenece únicamente a Dios. Aunque los humanos adscriben el acto de la creación a ellos mismos, lo que hacen no es verdaderamente creación. La humanidad solamente manipula lo que ya existe – lo que ya ha sido creado por Dios -. Una mesa está hecha de madera que provino de los árboles y sus piezas se unen con clavos y tornillos que a su vez provienen del metal que a su vez de las rocas. De hecho, todas las creaciones de índole humano pueden remontarse a sus elementos básicos que los seres humanos no pueden hacer. Inclusive el artista ‘crea’ diseños básicos en lo que él ha visto. No es posible imaginar algo que no haya sido percibido por los sentidos. Así, todos los pensamientos de los artistas son reflexiones acerca de lo que ya fue creado. Solamente Dios y sólo el crea de la nada. Proclamaron que el mundo creado y su contenido son originalmente de una parte de Dios15 . Es decir, de acuerdo a ellos, Dios cogió una parte de él mismo e hizo el universo. Esta conclusión es basada en la comparación entre Dios como hombre, que el solamente puede ‘crear’ a partir de lo ya existente y modificarlo. Sin embargo, Dios niega cualquier comparación que le dotaría de limitaciones humanas. En el capítulo ash-Shura de la revelación final, él establece:«No hay nada como El y es el omnioyente, el omnividente»
Corán 42:11
Así, el acto de la creación es consecuencia del atributo divino de ser del Creador. Dios se describe a sí mismo como el Creador de una variedad de aleyas a través de la revelación final para enfatizar a la humanidad que todo le pertenece a él solamente:
«Alá creó todas las cosas y El es el agente del cual todas las cosas dependen»
Corán 39:62
«Y Alá os creó y a lo que hacéis»
Corán 37:96
El hombre necesita darse cuenta que nada tiene lugar en éste universo sin el permiso de Dios. Para buscar protección del mal o buscar adquirir un bienestar de cualquier otra fuente que no sea Dios, es un grave error. En su ignorancia, mucha gente para atraerse la buena fortuna y evitar la mala recurren a una cantidad de hechizos y talismanes, astrología, la lectura de la mano, etc. En fin, en la revelación final encontramos el capítulo al-Falaq, en donde Alá informa a los seres humanos buscar refugio en él del mal:
«Di: Busco refugio en el Señor del amanecer, del mal que El ha creado»
Corán 113:1-2
Alá, Dios Todopoderoso, no es maligno, sino bueno. El creó un mundo en el cuál el mal o el bien no pueden hacerse por seres a quienes Dios dotó de ellos. Sin embargo, ningún mal o bien puede tener lugar en éste mundo sin el permiso de Dios. Esto es porque es tan insulso dirigirse a otros que no sean Dios mismo para ayuda y protección.
«Ninguna calamidad azota sino por el permiso de Alá»
Corán 64:11
El último profeta de Dios, Muhammad – la paz y bendiciones de Dios sobre él – dijo algo más de éste concepto del modo que sigue: «Sabed que si toda la humanidad se reuniese para socorreros, le sería posible hacerlo si ya está escrito por Alá; de lo contrario, si la humanidad entera se reuniese para haceros daño, le sería posible hacerlo porque Alá ya ha escrito que os sucediese (así).»16 EL CLEMENTE, EL INDULGENTE En la creación de la humanidad, el atributo divino del perdón, misericordia y gentileza están también manifestadas. El humano fue creado bueno y puro con una sapiencia natural del bien y el mal. El Todopoderoso también creó deseos en los hombres, y les dotó de habilidad para controlar sus deseos de acuerdo a la ley divina o volcarse a ellos para su propia perdición y seguirlos ciegamente. Dios creó a la humanidad sabiendo que ésta le iba a desobedecer. Por ende, él enseñó a la humanidad como arrepentirse, comenzando por Adán, y por tanto a purificarse de sus pecados. Adán y Eva representan un modelo para toda la humanidad a seguir. Ellos olvidaron la orden de Dios y Satán jugó con sus deseos. Cuando desobedecieron a Dios, ellos se volvieron arrepentidos a él (Dios) con suma humildad y les perdonó. En la desobediencia de la humanidad y el arrepentimiento a Dios, encontramos manifestados los atributos de perdón total y de la infinita misericordia. El último profeta informó a sus seguidores de éste hecho diciendo: «Si vosotros no cometisteis pecados y volvisteis hacia Alá buscando su perdón, El os hubiese reemplazado con otro pueblo que fuese pecador, y buscase el perdón de Alá, El les hubiese perdonado.»17 Cada uno de los 114 capítulo de la revelación final, exceptuando uno, empiezan con la oración: «En el nombre de dios, el Clemente, el Misericordioso.» Los atributos de Alá de misericordia y perdón están enfatizados para alentar a los humanos a no caer en la desesperanza. No importa cuan grande es el pecado del hombre, sea cual fuese, Dios puede perdonarlos si el hombre vuelve arrepentido a él con sinceridad. El mensajero – la paz y bendiciones de Dios sobre él – fue claro al decir: «Cuando Alá creó el universo, El a sí mismo se hizo obligatorio en un documento guardado por El, ‘Mi misericordia antecederá mi furia’. «18 El profeta dijo también «(Alá creó) la misericordia con 100 partes, una de las cuales fue descendida sobre los genios, hombres y otros seres vivos. Es por ésta parte que ellos se aman unos a los otros, se muestran amabilidad unos a los otros y así los animales tratan a sus crías con afecto. Alá ha reservado las 99 partes restantes para sus verdaderos adoradores el Día de la Resurrección.»19 Si Alá hubiese deseado, habría creado a la humanidad como ángeles incapaces de cometer pecado alguno. Sin embargo, eso no fue lo que Alá deseó, ya que él había creado ángeles. Los seres humanos fueron creados para poder hacer errores y cuando ellos se hubiesen dado cuenta de sus errores y buscar el perdón de Dios, los atributos divinos de misericordia y perdón se vuelven manifiestos.JUSTICIA SUPREMAEn el juicio de la humanidad cuando se acabe el mundo, los atributos de Dios de Justicia suprema e imparcialidad también se pondrán de manifiesto. Basado en su infinita sabiduría, Dios pudo haber creado a todos los miembros de la raza humana que vivieron sobre la tierra colocarlos inmediatamente algunos de ellos en el paraíso y otros en el infierno. Antes de crear al hombre, Alá ya sabía que opción harían en ésta vida, qué provisiones y oportunidades él les daría y en que estado de creencia o descreencia ellos morirían. Por lo tanto, en un sentido de la palabra, algunas personas fueron creadas para el paraíso y otras para el infierno. Aisha, la esposa del profeta Muhammad – la paz y las bendiciones de Dios sobre él – dice que él dijo: «¿Acaso no sabéis que Alá creó el paraíso y el infierno, y que creó habitantes para cada uno?»20 Si Dios hubiese inmediatamente colocado aquellos escogidos para el paraíso, ellos no cuestionarían la decisión de Dios. Ellos estarían felices por tal dictamen y vivirían para siempre llenos de bendiciones y agradecimientos por no estar en el infierno. Pero aquellos que fuesen colocados inmediatamente en el infierno siempre cuestionarían por qué fueron puestos ahí. Ellos tendrían una sensación de injusticia debido al desconocimiento de qué habían estado haciendo sobre la tierra para tal castigo. Aquellos en el infierno argumentarían incesantemente que si se les diese una oportunidad más para vivir otra vez en la tierra, ellos hubiesen creído y hecho buenas acciones. En consecuencia, Alá permite a los seres humanos a vivir su propia vida sobre la tierra y tomar todas las decisiones que hubiesen hecho, así para que cada uno que entrase al infierno sabrá que ellos escogieron el tormento por sí mismos. Ellos reconocerán la misericordia de Alá en sus vidas y conocerán sus pecados por rechazar los signos y guianza de Dios. Ellos aceptarán su juicio como el más justo y sin el menor reproche. Sin embargo, ellos continuarán pidiendo otra oportunidad para hacer bien en la tierra, pero Dios les contesta en capítulo as-Sajdah del Corán:
«Si solo vierais (el tiempo) cuando los pecadores doblegasen sus cabezas ante su Señor (diciendo), ‘¡Nuestro Amo! Hemos ahora visto y escuchado, así que devuélvenos (al mundo) y haremos actos justos. En verdad, ahora creemos con certeza’ «
Corán 32:12
Sin embargo, si Alá les mandase de vuelta a éste mundo y habiendo olvidado lo que vieron en el infierno, ellos escogerían de nuevo el mal y acabar en el infierno como antes. Dios habló al respecto en capítulo al-An’aam:
«… pero si fuesen devueltos (a este mundo), ellos en verdad regresarían a lo que les fue prohibido. En verdad que son mentirosos.»
Corán 6:28
AMOR DIVINO
El amor que Dios manifiesta en los seres existentes, ya sea creyente o escéptico que gocen de la vida, cuando solo es por un breve momento, también está comprendido en la creación del paraíso para aquellos que escogieron la rectitud sobre el mal. Alá establece en la revelación final que él ama a aquellos que hacen bien (5:13), aquellos que son justos (5:43), aquellos que son piadosos (9:4), aquellos que son pacientes (3:146), aquellos que ponen su total confianza en él (3:159), aquellos que frecuentemente se vuelven a él arrepentidos y a aquellos se purifican a sí mismos (2:222). Sin embargo, es él quien ha descrito a los seres humanos a través de las escrituras y a los profetas qué es el bien, lo justo y lo piadoso. En consecuencia, aquellos que siguen a los profetas son los más amados a Dios. En el capítulo Aal ‘Imraan, Alá instruyó al profeta Muhammad – la paz y bendiciones de Dios sobre él – diciendo lo siguiente a los creyentes:
«… si realmente amáis a Alá, seguidme y Alá os amará y os perdonará vuestros pecados…»
Corán 3:31
Hay que seguir así a los profetas, no solamente en los actos obligatorios ordenados por Dios, sino también en su ímpetu por hacer los actos de adoración voluntaria.
El amor de Dios también se manifiesta en su misericordia y bendiciones que El garantiza a aquellos que las merecen al igual que aquellos que no. Pero, es particularmente manifiesto en su voluntad para perdonar a quien sea que se vuelva a Alá en sincero arrepentimiento. Desde la creación de Adán y Eva, el arrepentimiento les fue garantizado al borrar sus pecados como ejemplo para todos los hombres que le siguieran en éste mundo. No importa cuan grande los pecados sean, la puerta para el arrepentimiento sincero permanece abierta hasta el final de éste mundo. Anas relató que el mensajero de Alá – la paz y bendiciones de Dios sobre él – dijo: «Alá, el Grandioso, ha dicho: Oh hijo de Adán, en tanto que tú me llames y solicites de mí, yo perdonaré lo que tú hayas hecho, y no me molesta. Oh hijo de Adán, aún cuando tus pecados llegasen hasta las nubes y tu solicitaste de mí perdón, yo te perdonaré. Oh hijo de Adán, si tú veniste a mí con pecados casi tan grandes como la tierra misma y tú me conoces sin asociarme con otros, yo te daré un monto similar de perdón (proporcional al pecado).»21 GRACIA DIVINAEn tanto que en el Paraíso ellos no entrarán por el sólo hecho de cometer buenos actos, es por la gracia de Dios que al final él les conducirá. El último profeta de Dios – la paz y bendiciones de Dios sobre él – dijo al respecto: «Observad la moderación, pero si falláis, haced tanto como podáis hacerlo modestamente, y sed felices. Porque ninguno entrará al paraíso solamente por sus acciones.» Los compañeros del Profeta dijeron «¡Oh mensajero de Alá! ¿No así tú?» El les respondió «No así yo, ya fuese que Alá no me cubriese de su gracia y misericordia.22 Y tened en cuenta que el acto más amado por Alá es el que es (hecho) constante, aunque éste sea pequeño.»23 Sin embargo, la gracia de Dios no es arbitraria, se basa tanto en la fe correcta y en los actos justos. En el capítulo Ala ‘Imraan, Alá dice:
«Quien sea que realice un acto bueno, tendrá (el valor de) diez veces como éste, y quien sea que cometa un acto malo, solamente será castigado con uno como éste, y ellos no serán desacertados.»
Corán 6:160
Si Dios trajera a la humanidad a rendir cuentas estrictamente, ni un acto bueno pesaría más que sus actos malos. Sin embargo, Dios ha manifestado su gracia al multiplicar el valor de los buenos actos, mientras que mantiene los actos malos con el mismo valor. Es por la gracia de Dios que los creyentes verdaderos entrarán al paraíso. Esto no significa que los actos no tengan un papel preponderante. Los actos tienen un papel grande, pero ellos no son el factor decisivo para que la gracia de Dios pese más que aquellos.
En consecuencia, la creación de los seres humanos, los errores que ellos hacen, el bien que ellos hacen, todo, es circunstancias puestas de manifiesto por los atributos de Dios de perdón y misericordia; su atributo de justicia y su atributo de gracia.
La humanidad no debería cuestionar por qué Dios escoge manifestar sus atributos de ésta manera, porque Alá se describe a sí mismo como el más Sabio y el más Erudito. Los humanos pueden sólo entender que Alá escoge revelarse a ellos.
«Ellos solamente abarcan de su conocimiento lo que El desea (que sepan)»
Corán 2:255
Así ellos no tratarán de igualarse con Alá. Si él ha dicho a la humanidad por qué él decidió hacer algo, no es a ellos los que les toca cuestionar por qué el decidió decidir. Tales cuestionamientos son interminables y escapan más allá del entendimiento humano. Es que ellos serán los cuestionados el Día del Juicio sobre sus acciones e intenciones y no El. En el capítulo al-Ambiyaa, Alá apunta claro:
«El no puede ser cuestionado a lo que El hace, mientras que ellos serán cuestionados.»
Corán 21:23
Al respecto, se reporta por Ibn ‘Abbaass que le dejó dicho el profeta Muhammad – la paz y bendiciones de Dios sobre él – que «Reflexionen sobre la creación de Alá pero no reflexionen sobre Alá.»24 Reflexionar sobre la realidad de Alá es hacerlo sobre el infinito. Y como la mente objeta cuando piensa sobre los límites del universo finito, las galaxias y la estrellas contenidos en él, también se confundirá cuando trate de entender lo no creado. El Profeta advirtió que las fuerzas satánicas buscarían introducir la duda en los corazones de los creyentes al instigar preguntas sin respuesta alguna sobre Dios. Abu Huraira relató que el mensajero de Alá – la paz y bendiciones de Dios sobre él – dijo: «Satán vendrá a cada uno de vosotros y preguntará: ‘¿Quién creó esto y aquello?’ Hasta que él pregunte: ‘¿Quién creó a tu Señor?’ Cuando él llega a esto, uno debe buscar refugio en Alá (diciendo: Yo sostengo mi fe en Alá y sus enviados)25 y alejarse (de tales pensamientos)26 ¿POR QUE DIOS CREO A LA HUMANIDAD? DESDE LA PERSPECTIVA DE LA HUMANIDAD, la pregunta «¿Por qué dios creó al hombre?» implica «¿Con qué propósito fue credo el hombre?» En la revelación final, ésta pregunta es contestada sin ambigüedad alguna. Los humanos son informados primero por Dios de que cada ser humano nace con una conciencia innata de Dios. En capítulo al-A’raaf, Alá dijo:
«Cuando tu Señor extrajo de las espaldas de Adán a su descendencia, la hizo testificar (diciendo): ‘¿No soy acaso vuestro Señor?’ ellos dijeron: ‘Sí, nosotros testificamos a ello.’ (Esto fue) en caso de que vosotros digáis en el Día del Juicio: ‘Nosotros eramos de los ignorantes.’ O por si vosotros decís: ‘Fueron nuestros ancestros los que adoraban otros además de Dios y nosotros sólo somos su progenie. Entonces ¿Nos destruirás por lo que aquellos mentirosos hicieron?’ «
Corán 7:172-3
El Profeta explicó que cuando Alá creó a Adán, el tuvo un convenio con él en un lugar llamado Na’maan en el 9º. día27 del 12º. mes. El (Dios) extrajo de Adán toda su descendencia que nacería hasta el fin del mundo, generación tras generación, y hacer ante El un convenio. El les habló, cara a cara, haciéndoles jurar que él (Alá) era su Señor28 . Consecuentemente, cada ser humano es responsable de creer en Dios, que es dictado dentro y cada una de las almas. Se basa sobre ésta creencia nata que Alá definió el propósito de la creación de la humanidad en el capítulo ath-Thaariyaat:»Yo he creado al genio29 y a la humanidad sólo para que me adoren.»Corán 51:56Así, el propósito esencial para los cual la humanidad fue creada es la adoración de Dios. Sin embargo, el Todopoderoso no le urge ni necesita que el humano le adore. El no creó a los seres humanos sin que necesiten de él. Si ni un sólo hombre no adorase a Dios, ello no disminuiría su gloria, y si toda la humanidad le adorase, ello no aumentaría su gloria. Dios es perfecto. El solo existe sin necesidad alguna. Todos los seres creados tienen necesidades. En consecuencia, es la humanidad la que necesita de adorar a Dios.
EL SIGNIFICADO DE LA ADORACIÓN
Para entender por qué los seres humanos necesitan adorar a Dios, uno primero debe entender qué significa el término ‘adoración.’ En Español el término ‘adoración’ proviene del latín adoratio, del verbo adorare, que se define como ‘la acción de reverenciar, con sumo honor o respeto a un ser, considerándolo como cosa divina.’30 De acuerdo a éste significado, el hombre está instruido para mostrar gratitud a Dios glorificándole. En el capítulo an-Nasr de la revelación final, Alá dice:»Glorifica las alabanzas a tu Señor.»Corán 110:3Al glorificar a Dios, el hombre escoge estar en armonía con el resto de la creación que naturalmente glorifica a su Creador. Alá refuerza este fenómeno en muchos capítulos del Corán. Por ejemplo, en capítulo al-Israa Alá establece:
«Los siete cielos y la tierra y lo que está en ellos le glorifica y no hay nada que no glorifique su alabanza31 . Sin embargo, vosotros no entendéis su glorificación.»Corán 17:44Sin embargo, en el idioma de la revelación final, el árabe, adoración es llamada ‘ibaadah, la cual se deriva de la palabra ‘abd que significa ‘esclavo’. Un esclavo es del cual se espera haga lo que su amo desea. En consecuencia, la adoración de acuerdo a la revelación final significa ‘obediente sumisión a la voluntad de Dios’. Esta era la esencia del mensaje de todos los profetas enviados por Dios a la humanidad. Por ejemplo, este entendimiento de adoración fue enfáticamente expresado por el profeta Jesús en el Evangelio de Mateo, 7:21, «No todo el que me dice: ¡Señor, Señor!, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre, que está en los cielos.» Se debe hacer notar que «voluntad» en ésta acotación significa ‘lo que Dios quiere que los humanos hagan’, porque nada sucede en la creación sin la voluntad (permiso) de Dios. La «Voluntad de Dios» está contenida en las leyes reveladas, las cuales los profetas enseñaron a sus seguidores. En consecuencia, la obediencia a la ley divina es la base de la adoración. En éste sentido, la glorificación también se hace cuando los humanos escogen obedecer a las instrucciones de Dios correspondientes a su glorificación.
LA NECESIDAD DE ADORAR
¿Por que los seres humanos necesitan adorar y glorificar a Dios obedeciendo las leyes divinamente reveladas? Porque la obediencia a la ley divina es la clave para el éxito en ésta vida y la próxima. Los primeros seres humanos, Adán y Eva, fueron creados en el paraíso y posteriormente expulsados del paraíso por desobedecer la ley divina. El único camino para los seres humanos para regresar al paraíso es obedecer a la ley. Jesús, el Mesías, se reporta en el Evangelio de Mateo, él hizo obedecer las leyes divinas como las llaves del paraíso: » ‘Ahora deteneos’, uno vino y le dijo, ‘Buen maestro, ¿Qué cosa buena haré para que pueda tener vida eterna?’ Así que él le contestó, ‘¿Por qué me llamáis bueno? Nadie es bueno sino el Único, que es Dios. Pero si tú quieres entrar en la vida eterna, guardad los mandamiento (de la ley).» 32 También en Mateo 5:19, Jesús, se reporta dijo, que había insistido sobre la estricta obediencia a los mandamientos diciendo, «Por tanto, quien quebrante uno de los mandamientos, aún los más pequeños, y enseñare así a los hombres, será más pequeño en el reino de los cielos; mas quien obrare y enseñare a observarlos, éste será grande en el reino de los cielos.»
Las leyes divinas representan guianza para la humanidad en todos los caminos de la vida. Ellas disciernen lo justo y lo malo para el hombre y le ofrece un sistema de gobierno completo para todos sus asuntos. El Creador sólo sabe lo que mejor beneficia a su creación y qué no. Así, las leyes divinas exigen y prohiben varios actos y elementos nocivos para proteger el espíritu humano, el cuerpo humano y la sociedad humana del daño. Para los seres humanos llevar a cabo su potencial al tener vidas dignas, justas, ellos necesitan adorar a Dios por medio de la obediencia a sus ordenanzas.
RECUERDO DE DIOS
Muchos de los tantos actos de adoración contenidos dentro de las leyes divinas están diseñados para ayudar a los hombres para recordad a Dios. Es natural que los seres humanos algunas veces olvidan aún las cosas más importantes. Los humanos están tan concentrados en llevar a cabo sus satisfacciones materiales que olvidan totalmente sus necesidades espirituales. La oración regular es ordenada para organizar el día del creyente sincero alrededor del recordatorio de Alá. Esto intercala necesidades espirituales con las necesidades materiales diariamente. La necesidad diaria de comer, trabajar y dormir están íntimamente vinculadas a la necesidad cotidiana de renovar la conexión entre el hombre y Dios. Con respecto a la oración regular, Alá establece en la revelación final, capítulo Taahaa:
«En verdad Yo soy Alá, no hay Dios además de mí, así que adoradme y establezcan la oración regular para mi recordatorio.»
Corán 20:14
Con respecto al ayuno, Alá estableció en el capítulo al-Baqarah:
«¡Oh vosotros los que creéis!, el ayuno ha sido prescrito para vosotros como así fue prescrito para aquellos antes de vosotros para que os volváis conscientes de Dios.»
Corán 2:183
Los creyentes son motivados a recordar a Dios tanto como les sea posible. Aunque la moderación en todos los campos de la vida, ya sea en lo material o espiritual, es generalmente fomentada en la ley divina, una excepción es hecha concerniente al recordatorio de Alá. Es virtualmente imposible recordar a Dios demasiado. En consecuencia, en al revelación final, capítulo al-Ahzaab, Alá motiva a los creyentes a recordarle tanto como sea posible:
«¡Oh creyentes! Recuerden a Alá a menudo«
Corán 33:41
La remembranza de Dios es enfatizada porque el pecado se comete generalmente cuando Dios es olvidado. Las fuerzas del mal operan libremente cuando se pierde la conciencia sobre Dios. En consecuencia, las fuerzas satánicas buscan ocupar la mentes de la gente con deseos y pensamientos irrelevantes para hacerlos olvidar a Dios. Una vez que Dios es olvidado, la gente voluntariamente se une a la corrupción y negligencia. La revelación final, el Corán, apunta hacia éste fenómeno en el capítulo al-Mujaadalah como viene:
«Satán ha escogido el mejor de ellos y le provocó olvidar a Alá. Aquellos son del partido de Satán. Verdaderamente el partido de Satán es el verdadero perdedor.»
Corán 58:19 Dios a través de la ley divina, ha prohibido los intoxicantes y el juego, básicamente porque ellos causan en el ser humano olvido de Dios. La mente humana y el cuerpo fácilmente se vuelven adictos a las drogas y al juego de azar. Una vez adictos, el deseo del hombre es continuamente estimulado por aquellos que los guían dentro de la corrupción y la violencia, entre muchos. Dios dice en el capítulo al-Maa’idah de la revelación final:
«El plan de Satán es incitar enemistad y odio entre vosotros con los intoxicantes y el juego; y obstaculizaros de la remembranza de Alá y la oración regular. Entonces ¿No os abstenéis?»
Corán 5:91
En consecuencia, la humanidad necesita recordar a Dios para salvación propia y desarrollo pleno. Todos los humanos tienen tiempos de debilidad en los cuales cometen pecados. Si ellos no tienen medios para recordar a Alá, ellos se hunden más y más hondo dentro dela corrupción en cada pecado. Sin embargo, aquellos que siguen las leyes divinas estarán en recordatorio constante de Dios, que les dará una oportunidad de arrepentirse y corregirse ellos mismos. La revelación final describe éste proceso correctamente el el capítulo Aal ‘Imraan:
«Aquellos quienes habiendo hecho algo vergonzoso o habiendo equivocado sus propias almas, recordad a Alá e inmediatamente pedid perdón por vuestros pecados…«
Corán 3:135
LA RELIGIÓN DEL ISLAM
El sistema más completo de adoración disponible para los seres humanos hoy día es el sistema basado en la religión del Islam. La palabra ‘Islam’ significa ‘sumisión a la voluntad de Dios.’ Aunque se refiere comúnmente a la ‘tercera de tres fés monoteístas’, no es una nueva religión del todo. Es la religión traída por todos los profetas de Dios a la humanidad. El Islam fue la religión de Adán, Abraham, Moisés y Jesús. Con respecto al profeta Abraham, Dios dice acerca de ésta materia en la revelación final diciendo:
«Abraham ni era judío ni era cristiano, sino que fue un musulmán hanifía (justo y honrado) que no adoró a otros excepto a Dios…»
Corán 3:67
Puesto que solamente hay un Dios único, y la humanidad una sola especie, la religión que Dios ha ordenado para los seres humanos también es única. El no prescribió una religión exclusivamente sólo para judíos, y otra exclusiva para indios, otra para europeos, etc. Las necesidades espirituales y sociales humanas son homogéneas y la naturaleza humana no ha cambiado desde que el primer hombre y la primera mujer fueron creados. Consecuentemente, ninguna otra religión es aceptada por Dios que no sea el Islam, como él claramente especifíca en el capítulo Aal ‘Imraan en la revelación final:
«De verdad que la religión de Alá es el Islam.»
Corán 3:19
«Y quien sea que desee otra religión además del Islam, ésta no será aceptada, y él estará entre los perdedores de la vida posterior.»
Corán 3:85
ACTOS DE ADORACIÓN
En el sistema islámico, cada acto humano puede ser transformado en un acto de adoración. De hecho, Dios ordena a los creyentes dedicar sus vidas enteramente a él. En capítulo al-A’raaf dice:
«Di: ‘En verdad mi oración, mi sacrificio, mi vida y mi muerte son para Alá, el Señor de los mundos.’ «
Corán 7:162
Sin embargo, para que esa dedicación sea aceptada para Alá, cada acto debe cumplir dos condiciones básicas:
1.- Primero, el acto debe ser hecho con sinceridad para la complacencia de Alá y no por reconocimiento y alabanzas para el ser humano. El creyente tiene que ser también consciente de Dios cuando realiza el acto para asegurar que no es nada prohibido por Alá o el último mensajero (que la paz y bendiciones de Dios sobre él).
Para facilitar tal transformación de los actos mundanos en adoración, Alá instruyó al último profeta para prescribir oraciones cortas y poder decirse inclusive en los actos más simples. La oración más corta que puede usarse para cualquier circunstancia es: bismillah (en el nombre de Alá). Hay sin embargo, muchas otras oraciones prescritas para ocasiones específicas. Por ejemplo, cuando sea que una nueva ropa sea puesta, el Profeta – la paz y bendiciones de Dios sobre él – enseñó lo siguiente a su seguidores:
¡Oh Alá! Gracias a ti, porque tú me has vestido. Te suplico se para bien y para el bien que fue hecho (la ropa); y busco refugio en ti de su mal y del mal para el que fue hecho.33 2.- La segunda condición es que el acto sea hecho de acuerdo al modo de vida profético, llamado en árabe sunnah. Todos los profetas instruyeron a sus seguidores para continuar su senda porque ellos fueron a su vez guiados por Dios. Lo que ellos enseñaron fueron verdades divinamente reveladas y sólo aquellos que siguieron su camino y aceptaron las verdades heredarían la vida eterna en el paraíso. Es dentro de éste contexto que el profeta Jesús, que la paz y bendiciones de Dios sobre El, se reportó en el Evangelio de Juan 14:6 dijo: «Jesús le dijo: ‘Yo soy el camino, de la verdad y la vida. Nadie va al Padre sino por mí’.» Similarmente, ‘Abdullah ibn Mas’ud relató que un día el profeta Muhammad – la paz y bendiciones de Dios sobre él – dibujó una línea sobre la arena para ellos y dijo: » ‘Este es el camino de Alá’, entonces él dibujó muchas líneas (que se ramificaban y salían de la principal) hacia la derecha y hacia la izquierda y dijo, ‘éstas son las veredas (de la mal guianza) y cada una de ellas es un demonio invitando a la gente a seguirlo’. Después él recitó la aleya, ‘De verdad, éste es mi camino que guía recto, así que seguidlo. Y no sigáis las veredas porque ellas os alejan del camino de Alá. Esa es Su orden a vosotros para que seáis concienzudos de Alá.’ 34 «35 Así el único camino aceptable para adorar a Dios es el que está de acuerdo al camino de los profetas. Siendo así el caso que hay innovación en los asuntos religiosos, se considerará por Dios en el más peor de todos los males. El profeta Muhammad – la paz y bendiciones de Dios sobre él – se reportó él dijo, «El peor de todos los asuntos es la innovación en la religión, porque cada innovación religiosa es una maldición que desvía y dirige al infierno.»36 La innovación en la religión es prohibida y desdeñada por Dios. El Profeta también dijo ,en palabras de su esposa Aisha, «Quien innove algo en éste asunto nuestro (el Islam), no nos incumbe, y se le será rechazado.»37 Se debe fundamentalmente a las innovaciones que los mensajes de los profetas antiguos fueron distorsionados y que involucra a muchas religiones falsas actualmente. La regla general para seguir a fin de evitar la innovación en la religión es que todas las formas de adoración son prohibidas, excepto aquellas que han sido específicamente prescritas por Dios y entregadas a los humanos por los verdaderos mensajeros de Dios.
LO MEJOR DE LA CREACIÓN Aquellos que creen en Dios único solamente, sin socios o progenie, y hacen actos justos (de acuerdo a los principios previamente mencionados) se vuelven la cumbre de la creación. Esto es, aunque la humanidad no es la más grande de la creación de Alá, ella tiene el potencial de volverse la mejor de su creación. En capítulo al-Bayyinah, Alá establece éste hecho como sigue:
«Seguramente aquellos que creen y hacen actos justos son lo mejor de la creación.» Corán 98:6
EL PEOR PECADO
El contradecir el propósito de la creación de uno es en consecuencia el peor de los males que el hombre pueda cometer. ‘Abdullah reportó que él preguntó al mensajero de Alá – la paz y bendiciones de Dios sobre él – que cuál era el pecado más grave a la vista de Alá y le contestó, «Asociar a Alá un adjunto aún cuando El te creó.»38 Adorar a otros además de Dios, en árabe se llama shirk, que es el único pecado imperdonable. Si un ser humano muere sin arrepentirse de sus pecados, Alá puede que le perdone todos sus pecados excepto el shirk. Al respecto, Dios dice lo siguiente en el capítulo an-Nisaa:
» En verdad Alá no perdonará quién le asocia a El, pero perdona lo menos grave a quien El quiere.»
Corán 4:48
Adorar a otros además de Dios involucra esencialmente dar el atributo de Creador a Su creación. Cada secta o religión hace esto a su propio modo particular. Un pequeño pero considerable grupo de gente, a través de los siglos, aún niega la existencia de Dios.39 Para justificar se rechazo al Creador, ellos estuvieron obligados a hacer la proclama ilógica de que éste mundo no tuvo principio. Ellos proclaman éste absurdo porque todas las partes observables del mundo tienen comienzo en tiempo, por lo tanto es razonable pensar el esperar que la suma de las partes también tengan un principio. Es también lógico asumir que lo que sea que causó que el mundo existiera no tuvo nada que ver con el mundo ni que tuvo un principio como el mundo. La conjetura ateísta de que el mundo no tuvo comienzo significa que la materia que constituye el universo es eterna. Esta es una declaración de shirk con lo que el atributo de Dios como ser sin principio es adjudicado a su creación. El número de ateístas genuinos han históricamente siempre sido demasiado ínfimos porque a pesar de sus declaraciones, ellos por instinto saben que Dios realmente existe. Esto es, a pesar de décadas de doctrina comunista, la mayoría de los rusos y los chinos continúan creyendo en Dios. El Creador Todopoderoso resaltó éste fenómeno en el capítulo an-Naml diciendo:
«Y ellos negaron injustificadamente y arrogantemente (los signos), aunque (muy) dentro de ellos estuvieron
convencidos de ellos.»
Corán 27:14
Para los ateos y materialistas la vida no tiene propósito alguno más allá del cumplimiento de sus deseos. Consecuentemente, sus deseos también se vuelven el dios al cual ellos obedecen y se someten en vez de tomar al único Dios Verdadero. En el capítulo al-Furqaan de la revelación final, Alá dice:
«Acaso no visteis al que torna sus deseos en su dios»
Corán 25:43
Los cristianos dieron al profeta Jesús el atributo divino del Creador primero al hacerle eterno igual como Dios40 . Después, por hacerlo una de tres o dos (de acuerdo a la secta que se pertenezca) personalidades de Dios poniéndole el título de «Dios – Hijo». Los hindúes, por el otro lado, creen que Dios se ha vuelto hombre en muchas eras, llamadas avatars, y entonces ellos dividieron los atributos de Dios en tres dioses, Brahma el creador, Vichnú el preservador del mundo y Ziva el destructor.
EL AMOR POR DIOS
El shirk también ocurre cuando los seres humanos aman, confían o temen a la creación más que Alá. En el capítulo al-Baqarah de la última revelación, Dios dice:
«Hay entre los hombres aquellos que adoran a otros además de Alá como iguales a El. Ellos los aman como sólo Alá debe ser amado. Pero aquellos que son creyentes tienen un amor más fuerte hacia Alá»
Corán 2:165
Cuando éstas y otras emociones similares son más dirigidas a la creación, causan a los seres humanos desobedecer a Dios en un esfuerzo por complacer a otros seres humanos. Sin embargo, solamente Alá merece un compromiso emocional humano total porque El es solamente quien debe ser amado y temido sobre toda la creación. Anas ibn Maalik narró que el Profeta dijo, «Quien sea que posee (las siguientes) tres características ha probado el dulce de la fe: el que ama a Alá y Su mensajero sobre todo lo demás; el que ama a otro ser humano por Alá solamente; y el que odia regresar a la incredulidad después que Alá le rescató al igual que él odia ser arrojado al infierno,» 41 Todas las razones por las cuales los humanos aman a otros humanos o aman otros seres creados son las razones para amar a Dios más que a Su creación. Los hombres aman la vida y el éxito, y les desagrada la muerte y el fracaso. Puesto que Alá es la última fuente de vida y éxito, el merece todo el amor y devoción de la humanidad. Las personas también aman a aquellos que les benefician y les ayudan cuando están en necesidad. Puesto que todo el beneficio (7:188) y la ayuda (3:126) provienen de Dios, El debe ser amado sobre todas las cosas.
«Si vosotros tratarais de contar las bendiciones de Alá, vosotros no seriáis capaces de añadirlas»
Corán 14:34 Sin embargo, el amor supremo que los hombres deben sentir por Dios no debe ser reducido al común denominador de sus pasiones y amor sentimental por la creación. Así como los humanos sienten amor por los animales éste no debería ser el mismo como el que sienten por otros humanos,42 el amor por Alá debe trascender el amor que sienten los seres humanos entre ellos. El amor humano por Dios debe ser fundamentalmente un amor manifestado en completa obediencia a las leyes de Dios, como se establece en el capítulo Aal ‘Imraan, «Si vosotros amáis a Alá, entonces seguidme (a mí, el Profeta) y Alá os amará.»43 Este no es un concepto abstracto, porque el amor humano por otros humanos también implica obediencia. Esto es, si uno es amado y solicita que algo sea hecho, los humanos irán por conseguir hacerlo de acuerdo al nivel de su amor por esa persona.
El amor por Dios debe también ser expresado en el amor de aquellos que Dios ama. Es inconcebible que quien ama a Alá pueda odiar a aquellos a quienes Alá ama y amar a aquellos a quienes El odia. El Profeta – la paz y bendiciones de Dios sobre él -, narrado por su compañero, Abu Umamah, que él relató, «El que ama por Alá y odia por Alá, regala por Alá y se contiene por Alá ha perfeccionado su fe.» 44 Consecuentemente, aquellos cuya fe es propia amaran a todos aquellos que Dios ama. En capítulo Maryam, Alá indica que El introduce el amor en los corazones de los creyentes para aquellos que son justos.»En verdad, Alá dotará amor (en los corazones de los creyentes) hacia aquellos que creen y hacen actos justos.»Corán 19:96Abu Huraira también relató que el mensajero de Alá – la paz y bendiciones de Dios sobre él – dijo lo siguiente al respecto, «Cuando Alá ama a un siervo suyo El informa al ángel Gabriel que El ama así y así y le dice que le ame, así entonces Gabriel le ama. Después Gabriel hace un comunicado a los habitantes de los cielos: ‘Alá ama así y así, por lo tanto amadle.’ Así que los habitantes de los cielos le aman. Entonces a él se le garantiza el amor de la gente de la tierra.»45 LAS ORACIONESLas oraciones deben ser dirigidas a Dios solamente, porque solamente El puede contestar las plegarias. El es accesible en tanto que se le llama con sinceridad.
«Cuando Mis siervos te preguntan (Oh Muhammad) sobre Mí, (diles) que yo soy cercano, yo contesto a la oración de cada uno que me llama.»
Corán 2:186
El Profeta enfatizó éste punto diciendo, «Si vosotros pedís en oración pedid solamente a Alá y si buscáis socorro, buscadlo solamente en Alá.» 46 Así, orar a los seres humanos o por medio de seres humanos, sea muero o vivo, es una forma de shirk. A uno cuyas oraciones son dirigidas se convierte en objeto de adoración. An-Nu’maan ibn Bashir reportó que el Profeta dijo, «la Súplica es adoración.»47 «De seguro, a quienes vosotros llamáis en oración además de Alá son siervos como vosotros mismos»Corán 7:194Así, la práctica cristiana católica de rezar a los santos es shirk. Cuando algo se pierde, rezan a San Antonio de Tebas para poder encontrarlo.48 San Judas Tadeo es el santo patrono de lo imposible y se le reza como intercesor en una enfermedad incurable, difícilmente para los matrimonios o cosas parecidas.49 Y cuando alguien se dispone a viajar, San Cristóbal, el santo patrono de los viajeros, es el objeto de suplicas y oraciones favorito para la protección. Sin embargo, en 1969 San Cristóbal fue borrado irreverentemente de la lista de santos por decreto papal, después de que fue confirmado que era un personaje ficticio.50 Las oraciones a María, madre de Jesús, y a los ángeles, como las sanmigueleadas51 son también shirk. Por otro lado, todo los cristianos cometen shirk todas las veces que dirigen sus oraciones al profeta Jesús, por medio de él o en su nombre. Igualmente, cualquier musulmán que adora, reza al Profeta Muhammad – la paz y bendiciones de Dios sobre él – comete shirk. En consecuencia, Dios ordenó al Profeta informar a su seguidores como se dispone en capítulo al-A’raaf:
«Di (Oh Muhammad): ‘Yo no poseo poder alguno para atraer el bien o inclusive conjurar el mal de mí mismo, excepto si Alá lo desea así. Si yo tuviera conocimiento de lo no visto (el mundo invisible), yo seguramente habría invocado solamente bien y el mal no recaería sobre mí.»
Corán 7:188
Abu Huraira reportó que cuando la aleya «Advierte a tus parientes más cercanos,»52 fue revelada al Profeta, el dijo lo siguiente a su parentela: «Oh pueblo de Coraich, fíjense en la salvación de Alá (al hacer buenas obras), porque yo no puedo protegeros de ninguna manera contra Alá;… Oh Fátima, hija de Muhammad, pídeme lo que desees (en ésta vida), pero no tengo nada que pueda protegerte de Alá.»53 ¿ PORQUE DIOS CREO A LA HUMANIDAD SOBRE LA TIERRA?LA PREGUNTA CONCERNIENTE AL PROPOSITO DE LA CREACION DE LA Humanidad puede tender a incluir al mundo en que vivimos. La pregunta sería entonces, «¿Por qué Dios creó a los seres humanos en éste mundo?» Una vez más, la respuesta a ésta pregunta puede ser fácilmente encontrada en la revelación final, capítulos al-Mulk y al-Kahf:
«(Es El) quien creó la muerte y la vida para probar cual de vosotros es el mejor en conducta; y El es el Poderoso, el Misericordioso.»
Corán 67:2
«Con seguridad Yo54 he creado todo esto sobre la tierra como sus adornos para que Yo pueda probar cual de ellos es el mejor en conducta.»
Corán 18:7
Así, el propósito para la creación de los seres humanos en éste mundo es probar su conducta.55 Este mundo de vida y muerte, salud y riqueza, enfermedad y pobreza, fue creado para indagar las almas rectas de las almas malignas. La conducta humana en éste mundo es la medida de la fe.Debe notarse, sin embargo, que las pruebas de conducta no son para informar a Dios sobre la humanidad, porque El sabía todo lo que se debe saber y qué les sucedería mucho antes de crearlos. Las pruebas sirven para confirmar en el Día del Juicio que aquellos que merecen ir al infierno y aquellos que van al paraíso solamente llegarán ahí respectivamente por la gracia de Dios. Con respecto a los seres humanos en ésta vida, las tentativas de conducta sirven para dos propósitos básicos: uno, el crecimiento espiritual humano; y dos, castigo o recompensa.
CRECIMIENTO ESPIRITUAL
Las tentaciones de este mundo son básicamente para el crecimiento espiritual de los seres humanos. Así como un fuego intenso que separa el oro de la mena a la cual está atado en forma natural, las pruebas purifican el carácter moral de los creyentes. Ellas fuerzan a los creyentes a escoger sus cualidades espirituales superiores sobre sus más bajos deseos y perversiones. Aunque no todas las pruebas son aprobadas, aún en el fracaso el creyente crece al aprender lecciones espirituales que le ayudan o la ayudan en pruebas futuras.
GENEROSIDAD Y SATISFACCIÓN
Por ejemplo, en todas las sociedades humanas las cualidades de generosidad y contento son consideradas entre las más nobles características. Sin embargo, ninguno de éstos intentos pueden desarrollarse si cada uno tiene la misma cantidad de riqueza. La generosidad puede ser solamente adquirida cuando el alma humana – advertida que hay que compartir con los necesitados para bien – lucha contra su deseo de atesorar sus posesiones. Por otro lado, la satisfacción se produce cuando el alma derrota el mal envidioso y avaricioso. El Creador sabiamente coloca el estado de éstas luchas espirituales al distribuir desequilibradamente la riqueza en éste mundo. En capítulo an-Nahl, de la revelación final, Alá dice:
«Alá ha favorecido algunos de vosotros sobre otros en sustento.» Corán 16:71
La avaricia y la mezquindad son formas de corrupción del deseo natural humano de poseer. Los creyentes son informados por la revelación que la riqueza es una tentativa dada a la humanidad por Dios. Las posesiones existen en el mundo antes que los hombres nacieran y permanecerán hasta después que mueren. Si la riqueza es utilizada de acuerdo a las instrucciones divinas, beneficia a aquellos que la tienen en los dos mundos. Pero si es utilizada egoístamente, se vuelve una maldición en ésta vida y provoca el castigo de la próxima. En el capítulo al-Anfaal de la revelación final, Dios advierte a los creyentes se cuiden de los peligros de la riqueza y los hijos:
«Conoce que tu riqueza y tus hijos son una prueba.»
Corán 8:28
Dios más adelante advierte en el capítulo al-Munaafiqun no dejar que sus deseos por riqueza e hijos los desvíen de la obediencia a Dios, porque ésta es la prueba de las posesiones.
«¡Oh creyentes! No dejéis que vuestra riqueza e hijos os desvíen de la remembranza de Alá»
Corán 63:9
«El puso por encima de vosotros a otros en rango para probaros con lo que os garantizó.»
Corán 7:165
El deseo de acumular riqueza no puede ser satisfecho en ésta vida. Entre más tienen los seres humanos, más quieren. El Profeta estableció que «Si un hombre tuviese un valle de oro, éste desearía otro, porque nada satisfacerá su apetito excepto la tierra (de su tumba). Y Alá perdona a quien se arrepiente sinceramente.» 56 Este deseo negativo puede solo vencerse al dar la riqueza propia en caridad. Así, Alá ordenó a los profetas cobrar la caridad de los más afortunados de entre sus seguidores para su distribución entre los pobres.»Tomad la caridad de su riqueza para purificarles y hacerles crecer.»Corán 9:103La caridad fue institucionalizada en el Islam con el nombre árabe Zakaah57 (caridad obligatoria) desde un principio. Cada creyente con exceso de riqueza es obligado a dar una porción de ella a los necesitados anualmente como un acto de adoración. Negarse al Zakaah se considera un pecado muy grave. Dar ésta caridad ayuda a los creyentes a darse cuenta que su riqueza no les pertenece ni hacen lo que se les da la gana con ella. Esto les enseña que ellos son custodios temporales de ésta riqueza que se debe dar una porción de ésta a los despojados. Consecuentemente, Dios describe a los verdaderos creyentes como aquellos que reconocen el derecho de los necesitados a una parte de su riqueza.
«Y de su riqueza los mendigos y necesitados tienen derecho»
Corán 51:19
Sin embargo, dar caridad debe ser hecha sinceramente para complacer a Dios, y no para exhibirse o tener bajo su control a otros. La recompensa de la caridad se pierde completamente, cuando es hecha con intenciones mundanas. Alá apunta ésta realidad en el capítulo al-Baqarah como viene:
«Oh creyentes, no destruyáis vuestros actos de caridad con los despojos de vuestra generosidad y por injuriar»
Corán 2:264
Encapricharse con la riqueza es sólo aún realzado por la envidia. Por ende, Dios también nos instruyó en no desear lo que él ha dado a otros. Dios apunta en ésta materia en el capítulo an-Nisaa, tal como sigue:
«No deseéis aquello por lo cual Alá ha favorecido a algunos de vosotros por encima de otros.»
Corán 4:32
El Profeta reiteró ésta pieza de consejo divino diciendo, «Ved a aquellos menos afortunados que vosotros, y no miréis a aquellos por encima de vosotros; es mejor para vosotros, porque no negaréis así lo que Alá ha bendecido para vos»58 Cuando los seres humanos enfocaron su atención sobre aquellos que tenían más riqueza que ellos, la envidia empezó a crecer. Ellos usualmente sienten y expresan que Dios ha sido injusto con ellos. Últimamente, ellos pueden cometer muchos pecados para cumplir sus deseos por lo que otros tienen. En su lugar, el Islam les advierte considerar a aquellos menos afortunados que ellos mismos. No importa cuan difíciles sean las circunstancias de la vida, siempre hay otros en peores situaciones. Consecuentemente, reflexionar sobre otros menos afortunados recuerda al ser humano las tantas bondades con la que Dios lo ha bendecido. Es en ésta lucha espiritual por evitar la envidia, que la más elevada cualidad de tolerancia se desarrolla. Más aún, de acuerdo a las enseñanzas de los profetas, las posesiones materiales no constituyen la verdadera riqueza de éste mundo. Abu Huraira acotó que el último mensajero – la paz y bendiciones de dios sobre él – que él dijo, «La riqueza no está en la posesión (mesurada), sino a conformidad.»59 Estar conforme no quiere decir que los seres humanos deban aceptar cualquier circunstancia que les salga a su paso y no tratar de mejorarla. Significa que, después de esforzarse uno lo mejor que puede y debe llevar a cabo en la vida, uno debe aceptar lo que Alá destina con una clara conciencia. Es solamente dejar el asunto de uno en las manos de Dios, después de intentarlo mucho, que el corazón descansa de los deseos por el placer de éste mundo. A éste respecto, Dios establece en capítulo ar-Ra’d de la revelación final:
«En verdad, es en la remembranza de Alá que los corazones encuentran alivio.»
Corán 13:28
CALAMIDADES
Las pruebas de ésta vida también vienen en forma de ‘desgracia’ y calamidades que contribuyen al crecimiento espiritual de los verdaderos creyentes, y purificarlos del pecado. Recíprocamente, las pruebas de la vida de infortunio recuerdan a los creyentes errantes volver a la vía correcta y castigar a los incrédulos en ésta vida antes de la que viene.
PACIENCIA
Las calamidades están basadas en que la cualidad espiritual más elevada de paciencia sea desarrollada. Por consiguiente, no es de sorprendernos encontrar que los justos son sujetos de muchas tragedias y dificultades en sus vidas. Sa’d reportó que cuando él le pregunto al Profeta – la paz y bendiciones de Dios sobre él – que quién sobre la humanidad tenia más pruebas, y él le contestó, «Los profetas, después aquellos parecidos a ellos y después aquellos que les siguen. El hombre es probado de acuerdo al nivel de su fe. Si su fe es firme, sus pruebas se incrementarán con severidad, pero si hay debilidad en su fe, será probado de acuerdo a ella.»60 La verdadera paciencia es el producto de la confianza verdadera en Dios en los tiempos de calamidad. Confiar en el Amo de uno es un aspecto importante de la adoración y la consecuencia natural de la fe real. Puesto que creer en Alá significa aceptar que nada tiene lugar en el universo sin Su permiso, entonces solamente Alá merece la completa confianza de la humanidad. Porque solamente es la promesa de Dios la que nunca se quebranta. No importa cuan recto y justo un ser humano sea, el o ella comete errores. Los hombres siempre se abandonan unos a otros debido a su naturaleza errante. Consecuentemente, Alá acota que el Profeta Jacob en capítulo Yusuf lo siguiente:
«La decisión yace solamente en Alá. Yo pongo mi confianza en El solamente y todo el que confía debe solo confiar en El.»
Corán 12:67
Alá más adelante asegura al ser humano que si ellos ponen su completa confianza en El, será El suficiente para ellos en los tiempos más difíciles.
«Quien sea que confíe en Alá le encontrará suficiente.»
Corán 65:3
La confianza en Dios está incorporada en la firme creencia de que Alá sólo sabe lo que es mejor para la humanidad; la firme creencia de lo que los hombres pueden percibir como lo bueno para ellos puede que no, y a la larga, ser bueno para ellos. Como Alá dice en el capítulo al-Baqarah:
«Tal vez a vosotros os disguste algo y es bueno para vosotros, y puede que os guste algo y es malo para vosotros. Alá sabe y vosotros no.»
Corán 2:216
Las tentaciones por las cuales Alá prueba a los seres humanos están específicamente diseñadas a sus propias necesidades individuales y las circunstancias. Dios crea pruebas para cada persona de acuerdo a sus posibilidades para poner de manifiesto lo mejor de ellos. Sería injusto y disparejo para los seres humanos ser probados más allá de sus capacidades y entonces ser castigados por sus fallas. En consecuencia, Dios enfatiza en muchos versos de la revelación final que El no es injusto con nadie. Por ejemplo, El dice en capítulo al-Kahf:
«Y tu Señor no oprime a nadie»
Corán 18:49
Si Alá es verdaderamente justo, ello significa que las pruebas que enfrenta el ser humano en ésta vida no está más allá de su control. Para tranquilizar a la humanidad, Alá establece éste hecho repetidamente en el Corán. Un ejemplo de ésta tranquilidad puede encontrarse en el segundo capítulo titulado al-Baqarah:
«Alá no aflige un alma más allá de su capacidad»
Corán 2:286
Más aún, el Todopoderoso promete que las situaciones difíciles que los humanos enfrentan en la vida tendrá lapsos de descanso. Si las pruebas fuesen continuas ellos con certeza se volverían insoportables. En consecuencia, cada prueba es seguida por un periodo de alivio como Alá enfáticamente establece dos veces en capítulo al-Inshiraah:
«Pero seguramente que con la dificultad viene (el tiempo de) la facilidad. De seguro con las dificultades viene (un periodo más) la facilidad.«
Corán 94:5-6
DESESPERACIÓN
Se debe a ésta causa (la desesperación) que el suicidio está explícitamente prohibida en el Islam. Alá dice en capítulo an-Nisaa’:
«No os matéis vosotros mismos porque con seguridad Alá es misericordioso con vos»
Corán 4:29
Aquellos que cometen suicidio son básicamente los que dicen que Dios los ha sobrecargado con un peso que no pueden llevar a cuestas. Ellos acusan falsamente al Creador de tratarlos injustamente y por eso caen en el estado de corrupto de incredulidad. Debido a su rechazo en la fe, sus pensamientos sobre Dios se vuelven malignos y ellos terminan por completo desesperados. La ‘vida’, como ellos suelen decir, ‘es tan injusta que es innecesario continuar viviendo’.
«Seguramente solo un pueblo incrédulo desespera en la misericordia de Alá.»
Corán 12:87
Consecuentemente, Dios ha informado a la humanidad que el castigo para aquellos cuyo asilo de malos pensamientos sobre El es el eterno en al-Fath Alá dice:
«Que El puede castigar a los hipócritas, hombres y mujeres y a los idólatras, hombres y mujeres , y a los idólatras, hombres y mujeres, cuyo asilo de malos pensamientos tienen sobre Alá. Un tormento maligno los acecha, porque Alá está furioso con ellos y los maldice . Y El ha preparado el infierno para ellos; un mal fin.»
Corán 48:6
ESPERANZA
Por otro lado, las promesas divinas de justicia y misericordia llenan a los creyentes con la confidencia necesaria para enfrentar pacientemente las dificultades de ésta vida. En consecuencia, la esperanza dentro de la misericordia de Dios forma parte esencial de la fe. Aquellos que creen en Alá y pacientemente luchan por hacer lo que es correcto, tienen el derecho de tener la esperanza por su misericordia, porque El ha prometido ayudar y apoyar a aquellos que son pacientes:
«Oh creyentes, buscad ayuda en la paciencia y la oración. Verdaderamente, Alá está con aquellos que son pacientes.»
Corán 2:153
En verdad que aquellos que creyeron, emigraron y lucharon por Alá, para aquellos esperanza de la misericordia de Alá, porque Alá es Todo Clemente, Todo Misericordioso.»
Corán 2:218
Por supuesto, el paraíso es la recompensa a la paciencia basada en la sincera creencia en Dios. Dios informa a los creyentes de su recompensa como sigue:
«… Así que anuncien las buenas nuevas (del paraíso) a aquellos que son pacientes. Aquellos que, cuando les afligió con calamidad, dicen: De verdad nosotros pertenecemos a Alá y a El regresaremos.»
Corán 2: 155-6
La paciencia está también basada en la creencia que lo que sea que sobreviene a la humanidad es fundamentalmente una consecuencia de sus propios malos actos.61 Dios recuerda a la humanidad de ésta realidad en el capítulo ash-Shuraa de la revelación final diciendo:»lo que sea que sobreviene a vosotros es el resultado de lo que sus manos han logrado. Y El perdona tanto.»Corán 42:30El hecho es que Dios ha dispensado a los humanos por todos sus males. Sea que El los castigue estrictamente de acuerdo a sus actos, como así a ellos junto con la tierra destruirlos. Dios indica éste tema en el capítulo Faatir como sigue:
«Y si Alá fuese a castigar un pueblo por lo que merecen, El no hubiera dejado criatura alguna viva sobre la faz de la tierra.»
Corán 35:45
Consecuentemente, tanto las pruebas de bien y de mal benefician al creyente. Las vidas de los verdaderos creyentes están balanceadas entre los extremos de la conducta humana. Ellos de éste modo ni se vuelven tan alegres con los éxitos de la vida pudiendo así olvidar a Dios, ni así se vuelven depresivos con las dificultades y fracasos de la vida que ellos así olviden la esperanza en Dios. En su lugar, ellos recuerdan a su Señor y Benefactor, y confían en Sus decisiones. Suahyb Ibn Sinaan, relató que el mensajero de Alá – la paz y bendiciones de Dios sobre él – dijo, «¡La cuestión sobre el creyente es sorprendente! El total de su vida es benéfica, y es solamente en el caso de los creyentes. Cuando los buenos tiempos llegan a él, éste es agradecido y es benéfico para él, y cuando los malos tiempos le azotan, él es paciente y es también bueno para él (por contradictorio que parezca)» 62 . Esta es la situación del que ha aceptado el destino de Dios. En consecuencia, creer en ambos (el bien y el mal) son un decreto destinado como el sexto pilar de la fe en el Islam.Por otro lado, si lis creyentes experimentan una vida ausente de problemas, debe ser tomado como una señal que algo malo está pasando. Bajo tales circunstancias, el creyente sincero debe darse tiempo para reflexionar sobre las realidades de su vida (sea hombre o mujer). También las pruebas no son tan obvias y ellas no nos advierten de ellas o que éstas están lejos del camino correcto. Alá informa a los creyentes en el capítulo at-Tauubah que el aparente regocijo que los creyentes tienen por su gran riqueza e hijos es solamente un preludio a su castigo:
«No os aterrorizados por su fortuna o sus hijos. Alá solamente desea castigarlos con éstas cosas de ésta vida y permiten a sus almas morir mientras están en estado de incredulidad.»
Corán 9:85
Esto no indica que los creyentes deban perseguir los problemas y calamidades, y desearlos con vehemencia, porque Alá les ha enseñado a rezar: «Nuestro Señor, no nos aflijas con lo que has impuesto a nuestros antecesores.» 63 En vez de ello, deberían agradecer a Dios por la pruebas que El les ha evitado. Sin embargo, en tiempos de afabilidad ellos deben recordar vigilantes y no volverse olvidadizos de las pruebas, porque a menudo el éxito y la felicidad ciegan a la gente de las pruebas de la vida.
EL RECORDATORIO
Las pruebas algunas veces sirven como un castigo recordatorio para aquellos que se han desviado y un incentivo para que regresen a la vía recta. Cuando la gente se desvía, ellos a menudo escuchan el consejo de los que los rodean. Sin embargo, cuando una calamidad les azota o hacia aquellos seres queridos, amados y cercanos a ellos, la realidad les pega duro a aquellos que aún tienen fe y reconocen sus errores.
» Yo64 les haré probar el trago amargo de un castigo menor antes del castigo mayor y tal vez así se vuelvan (al camino de la verdad).»Corán 32:21La prueba de las calamidades la cual recuerda a la humanidad de su desviación puede venir en la forma de la inhumanidad de la gente a sus semejantes, como es en el caso de las atrocidades inmencionables e infligidas por los serbios a los musulmanes de Bosnia quienes se habían desviado muy lejos del camino del Islam; o la invasión brutal de Saddam a Kuwait y el subsecuente bombardeo indiscriminado sobre objetivos civiles en Irak por parte de los estadounidenses. Alá recalca que cualquier humano que sufra a manos de otro humano, es porque ellos mismos se lo buscaron. Sin embargo, el sufrimiento es un recordatorio al camino de la verdad y la rectitud.
«La corrupción a aparecido sobre la tierra y en el mar por causa de lo que ha logrado la mano del hombre a fin de que (Alá) pueda hacerles saborear una parte de lo que han hecho, y para que ellos puedan regresar (a la vía recta).«
Corán 30:41
HIPOCRESÍA
Las calamidades también exponen a aquellos que falsamente proclaman la fe, al igual que muestra a los que no creen, que ellos han escogido el infierno por su propia y libre voluntad. Ha habido muchos casos de gente que se convierte al Islam por las razones equivocadas, y después de descubrir que había más dificultades en sus vidas que cuando estaban en su condición anterior ellos vuelven a sus creencias de antes de conocer el Islam. Dios establece en el capítulo al-‘Ankabut de la revelación final:
«¿Acaso la gente imagina que serán dejados en paz y no probados con aflicciones porque ellos simplemente dicen ‘Creemos’? En verdad, Yo65 he puesto a prueba a aquellos antes que vosotros. Alá sabe quienes son los los sinceros y aquellos que mientan-«Corán 29:2
CASTIGO
Aquellos que transgreden los límites puestos por Dios se exponen a sí mismos al castigo de ésta vida y la otra. A través de todo el Corán, Alá describe muchas naciones del pasado que rechazaron la guianza divina y en consecuencia fueron destruídos. Estas historias sirvieron como advertencias para la humanidad de las consecuencias de la rebelión contra las ordenes de Dios. En el capítulo an-Nur, Alá da una advertencia general como sigue:
«Deja a aquellos que contradicen sus mandatos cuidarse del juicio o un castigo severo.»
Corán 24:63
El castigo puede venir en una variedad de formas diferentes. Tal vez el castigo más obvio que aflige a la humanidad en todos los países es la enfermedad del S.I.D.A.,66 el cual apareció por primera vez en los anales médicos al comienzo de los ochenta67 . La vasta mayoría de aquellos que son afectados por ella alrededor del globo son los promiscuos. Inicialmente los homosexuales fueron las principales víctimas, después los bisexuales, seguidos en tercer lugar por los heterosexuales y usuarios de drogas intravenosas. Todos éstos grupos estuvieron en abierta rebelión contra las leyes divinas que restringen las relaciones sexuales entre hembras y machos con las bondades del matrimonio y aquellas leyes que prohiben el uso de intoxicantes. Algunos tal vez puedan resaltar que el S.I.D.A. también se expandió por razones de transfusión de sangre y a los hijos por causa de sus padres. Sin embargo, las estadísticas médicas muestran que tales casos son relativamente pocos en comparación con las primeras categorías. En cualquier caso, Alá ha advertido en capítulo al-Anfaal de la revelación final que cuando Su castigo llega no es exclusivamente al mal, sino que afecta a la sociedad como un todo.
«Cuidáos de una prueba que no afligirá solamente al pecaminoso entre vosotros, y sabed que Alá es severo en el castigo.«
Corán 8:25
Hace 1,400 años el Profeta Muhammad – la paz y bendiciones de Dios sean con él – profetizó la llegada de tales pruebas. Ibn ‘Umar acotó que él dijo así, «Siempre que la promiscuidad se practica abiertamente entre un pueblo, una plaga y angustia se expandirán entre ellos las cuales no tienen par con las de sus predecesores.» 68 Sin embargo, el S.I.D.A. es solamente una de una larga serie de enfermedades. Antes del S.I.D.A., una advertencia vino en la forma de otra enfermedad llamada herpes la cual se diseminó en un rango limitado solamente a los promiscuamente sexuales a principios de los 1960´s y 70´s. Fue declarada una epidemia en América a mediados de los setenta, y no se ha conocido cura alguna para ella hoy día. La atención de la gente se dirigió a otro lado a fines de los setenta porque no era fatal69 , mientras que el S.I.D.A. si lo era.¿POR QUE DIOS CREO EL MUNDO?EL PROPOSITO, CONCERNIENTE A LA HUMANIDAD, para lo cual el mundo y su contenido fueron creados es específicamente definido en la revelación final. Alá dice en el capítulo Ibrahim y al-An’aam:
«Alá quien creó los cielos y la tierra y desciende lluvia del cielo, que madura la fruta para vuestras provisiones. El ha puesto naves a vuestro servicio que navegan a través del mar por Su mandato; de igual modo El ha puesto los ríos bajo vuestro servicio. El también ha colocado el sol y la luna en órbitas para el servicio de vosotros; y El ha hecho la noche y el día para vuestro servicio.»
CORÁN 14:32-33
«Es que El causa el amanecer, hizo la noche para el descanso, y el sol y la luna para calcularlo (el tiempo). Esa es la determinación del Todopoderoso, el Todo Sapiente. Es El quien ha hecho las estrellas para vuestra guianza en la oscuridad sobre la tierra y en el mar. Yo he explicado en detalle éstos signos para la gente que conoce.»
Corán 6:96-7
Los conjuntos de éste mundo fueron creados para el servicio de la humanidad. Ya sean producto de la invención humana, como las naves; o sean naturales en sí, todos son garantizados por Dios para el beneficio de los seres humanos. Sin embargo, tales dones no están sin una responsabilidad. Los humanos son requeridos para reconocer las bondades de Alá y los agradecimientos y mercedes son dadas a El y glorificarle. Por ejemplo, El enseñó a los creyentes en el capítulo az-Zukhruf para rezar como sigue cuando sea que montan un animal o un vehículo:
«Para vosotros que montáis las espaldas (de los animales) entonces recordad las bendiciones de vuestro Señor diciendo: Gloria sea a El quien sometió esto para nosotros y no hubiésemos podido hacer por nosotros mismos. Y en verdad regresamos a nuestro Señor.»
Corán 43:13
Los seres humanos también acarrean la responsabilidad de gobernar la creación de acuerdo a las leyes de Dios. Este es el propósito concerniente al hombre con respecto a la demás creación.
A ellos se les ordena utilizar los conjuntos de éste mundo de acuerdo a las leyes de Dios. Abu Sa’id al-Kjudri acotó que el mensajero de Alá – la paz y las bendiciones de Dios sobre él – dijo como sigue, «El mundo es hermoso y verde, y Alá – sea El exaltado – os ha hecho gobernantes sobre él para observar como actuarán.» 70 Los seres humanos no son libres de hacer con el mundo lo que les plazca. Consecuentemente, la actitud negativa de la sociedad materialista secular hacia la naturaleza es contraria a la revelación divina.Las sociedades materialistas consideran a la naturaleza como un enemigo a ser conquistado. No es bastante apreciar la belleza del monte Everest, en su lugar, la vida debe desperdiciarse cada año en ‘conquistarlo’ al escalar sus cumbres. Ya no es suficiente maravillarse ante los exóticos animales del mundo, en su lugar, durante los safaris del siglo pasado, muchos de éstos animales fueron cazados y extinguidos para proveer trofeos a la salas de los occidentales. Aunque los safaris han sido ahora detenidos, los reducidos números de animales como el rinoceronte continúan siendo amenazados con la extinción debido a la importancia de sus cuernos como ingrediente para las medicinas tradicionales del lejano oriente y para afrodisiacos.
LOS ANIMALES
De acuerdo a la revelación final, matar animales por deporte es prohibido y pecaminoso a la vista de Dios. Ibn ‘Abbaas reportó que el mensajero de Alá – la paz y bendiciones de Dios sobre él – que dijo, «No toméis como blancos cualquier cosa viviente.» 71 Tomar la vida de cualquier animal vivo es prohibido excepto si es para comida, para protección de la vida humana, o para la ropa. Matar por diversión y entretenimiento es básicamente maligno. Pero inclusive cuando la vida de un humano es tomada por los crímenes que cometió contra la sociedad, o la vida de un animal es tomada para comida, esto se debe de hacer tan menos doloroso como sea posible. Shaddaad Ibn Aws rememoró dos cosas que el mensajero de Alá – la paz y bendiciones de Dios sobre él – había establecido, «Con seguridad Alá ha impuesto la benevolencia para cada cosa; así que cuando ejecutéis a alguien, hacedlo de la mejor forma y cuando degolléis un animal, hacedlo en la mejor forma. Dejad que cada uno de vuestros cuchillos estén bien afilados y permitid al animal degollado morir apaciblemente.» 72 Aunque algunos «amantes de los animales» en los países occidentales se han opuesto al método islámico de degollación animal, la alternativa que proponen los occidentales de aturdir al animal por medio de choques eléctrico o quebrar a golpes la cabeza son métodos muy lejos de ser piadoso e indoloros. Cuando el cuello es cortado por un cuchillo extremadamente filoso, el animal no lo siente y muere gradualmente y lo menos doloroso conforme su sangre fluye lentamente de su cuerpo.
Cuidar a los animales es divino por la ley, aún en el caso de los perros que generalmente son detestados en los hogares musulmanes.73 Abu Huraira refirió que el Profeta dijo, «Un hombre estaba sediento mientras caminaba, así que bajó una cuesta hacia un pozo y bebió de él. Al salir vio a un perro hambriento resollando y comiendo lodo. El hombre dijo (a sí mismo), ‘Este animal está tan sediento como yo lo estuve.’ Así que él bajó al pozo y llenó su zapato con agua. Entonces él sostuvo su zapato entre sus dientes, salió y dio al perro agua. Alá le agradeció y le perdonó (y le colocó en el paraíso por ésta acción).»74 La gente preguntó, «¡Oh mensajero de Alá! ¿Recibiremos alguna recompensa por servir a los animales?» El les contestó, «En cada ser vivo (a su servicio) hay una recompensa.» 75 Abu Huraira también narró que el mensajero de Alá – la paz y las bendiciones de Dios sobre él – dijo, «Alá perdonó a una prostituta (de entre las israelitas)76 quien ató su zapatos (el de ella) a su chalina y extrajo algo de agua (de un pozo) para un perro que ella miró muriendo de sed. Por eso, Alá la perdonó.»77 Concretamente, dañar animales es un pecado mayor de acuerdo a la ley islámica. ‘Abdullah ibn ‘Umar relató que el mensajero de Alá – la paz y bendiciones de Dios sobre él – dijo, «Una mujer fue castigada y colocada en el infierno porque ella aprisionó a un gato hasta que murió. Ella ni le dio de beber ni de comer, ni lo puso en libertad para comer de los roedores de la tierra.»78 Hay ciertas circunstancias donde es necesario aplicar dolor a los animales como en el caso de golpearlos para poder moverlos y herrarlos por mera identificación. Sin embargo, aún en ésta situaciones Dios dio instrucciones para protegerlos. Yaabir reportó que el Profeta prohibió golpear a los animales en sus caras o marcarlos con hierro en sus caras.79 VEGETACIONLa responsabilidad de cuidar éste mundo no termina al estar al servicio de los animales. El reino vegetal es también considerado de muy alta estima en la ley divina. Tanto es así, que a los musulmanes en tiempos de guerra se les prohibe destruir árboles frutales80 y el plantar árboles es considerado un acto de caridad. Yaabir señaló que el mensajero de Alá – la paz y bendiciones Dios sobre él – dijo, «Cualquier musulmán que plante un árbol gana la recompensa de una donación en caridad. Lo que es consumido de ésta caridad, lo que es robada de ella, lo que los animales y aves comen, todo eso es caridad. Cualquiera o lo que sea que se extraiga de él (el árbol), hace ganar al plantador la recompensa (dada en) caridad.»81 El Islam anima a que ningún esfuerzo debe escatimarse en plantar, inclusive cuando esto se vuelve la última cosa que el creyente pueda hacer en su vida. Anas relató que el Profeta dijo, «Si (las señales de) el comienzo del Día de la Resurrección aparecen y uno de vosotros tiene una semilla en su mano, él debe plantarla Si le es posible hacerlo antes de que la resurrección comience.» 82 Consecuentemente, los seres humanos tienen una responsabilidad para cuidar todos los aspectos del entorno dentro del cual fueron creados, como un deber sagrado para con Dios. Esto requiere una activa oposición a la polución masiva y la destrucción de los bosques de lluvia causados por la sociedades de consumo materialistas de hoy día en todo el mundo. De acuerdo a la revelación, la negligencia a éste deber es considerado un pecado y su cumplimiento un acto de adoración.
CONCLUSIÓN
SIN EL CONOCIMIENTO DEL PROPÓSITO DE LA CREACIÓN, los seres humanos vagan inútilmente por la vida, como los barcos en el océano sin rumbo fijo. Sus objetivos son también equivocados debido a las enseñanzas religiosas incorrectas o materialistas y confinados así a éste mundo. Es por lo tanto, esencial por su propio bien que sepan por qué Dios les creó.
Fundamentalmente, Alá creó con el fin de manifestar sus atributos. En fin, la creación es la consecuencia de ser del Creador, el paraíso manifiesta Su misericordia y Su gracia; el infierno Su justicia; los errores de la humanidad Su perdón; los muerto y lo vivo Su generosidad, etc. El significado de saber que la creación es un medio por el cual Dios manifiesta Sus atributos significa que los seres humanos pueden entonces correctamente reconocer a Dios y aceptar Su decreto y sus destinos. Sin embargo, es aún de mayor importancia que los seres humanos sepan el propósito por el cual ellos fueron creados. La revelación final qué se adora a Dios porque se debe adorarle para afianzarnos a la rectitud y al estado espiritual necesario para entrar al paraíso. El significado de éste conocimiento es que los seres humanos entiendan que la adoración es tanto una necesidad al igual que comer y respirar y que no es un favor el que le están haciendo a Dios.
Es también esencial que los seres humanos se afiancen a las importancias de las bondades de éste mundo y sus pruebas. Sin conocimiento del propósito que está detrás de su creación, los humanos tienden a mirar al mundo como un ser hostil a ellos. Sin embargo, Dios lo creó básicamente para el beneficio de ellos. Las pruebas de bien y mal están diseñadas para sacar las cualidades espirituales más elevadas de los seres humanos. Sin embargo, los humanos no son capaces de beneficiarse de la pruebas excepto que ellos pongan completa confianza en Dios y tengan paciencia en lo que El les ha destinado. Para aquellos que rechazan a Dios, las pruebas de éste mundo se convierten en un castigo para ellos en ésta vida antes del castigo eterno en el mundo próximo a vivir.
El conocimiento del propósito de éste mundo también hace al creyente concienzudo, ambientalmente hablando. La humanidad es responsable de utilizar las bondades de ésta vida con justicia. Las criaturas de la tierra y los mares, la vegetación y la atmósfera han sido puestas a su cuidado. Consecuentemente, los humanos deben tener gran cuidado al preservar el ambiente y las criaturas vivientes por igual como una forma de agradecer al Señor de los mundos.
Con tal conciencia comprensiva del propósito, los seres humanos se vuelven completos. Ellos se transforman en guías para la humanidad mostrando el camino correcto. Consecuentemente, Alá les describe como lo mejor de la humanidad en la revelación final:
«Vosotros sois el mejor pueblo escogido para la humanidad porque vosotros ordenáis el bien, prohibís el mal y creéis en Alá.»
Corán 3:110